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Desde mi rincón tanatológico.

DEPRESIÓN POSPARTO

Tijuana B.C  a 10 de oct. 2006.

Desde mi rincón tanatológico.

Depresión posparto.

    Una de esas tantas veces que va uno a los hospitales a trabajar asistiendo a algún cirujano para cualquier procedimiento, me acerque a la central de enfermería para tratar de entablar conversación con la enfermera encargada y pasar el rato mientras llegaba el equipo quirúrgico y comenzar la tarea de ese día, pero me llamo la atención que al acercarme a dicha central y pasar al frente de un cuarto cuya puerta estaba abierta, vi a una mujer mucho muy delgada, joven, pero con un aspecto muy deteriorado, por lo que me atreví a preguntarle a la enfermera que cual era su diagnóstico, en un momento pensé que me diría que se trataba de una paciente con anorexia nervosa, de esas que dejan de comer  por no tolerarse gordas o por estar a la moda y que de inicio lo pueden controlar, pero al paso de algunos meses o años rompen con el equilibrio fisiológico del hambre y después ya no saben como remediarlo y es necesario internarlas para darles alimentación por sondas y me acorde de Karen Carpenter, esa cantante tan famosa en los 70s, que murió muy joven precisamente por evitar estar gorda y lo sorprendente era, que ella nunca estuvo con kilos de más, solo era una apreciación compulsiva y trataba a toda costa de  estar delgada, en fin. Pero regresando al relato, lo que me sorprendió es que esa mañana había pasado muy temprano el psiquiatra y había hecho el diagnostico de depresión posparto.

     Llegó mi equipo y entramos al quirófano a operar a una joven que se había enfermado de la vesícula y aunque fungía como anestesiólogo, no me podía separar la imagen de esa mujer caquéctica (mucho muy delgada) y que hacia muchos años no había visto grado tal de desnutrición. Al final de la cirugía y estando en el descanso medico, llego un internista que estaba a cargo de la paciente y como lo conocía, me atreví a preguntarle que de que forma había llegado a tal grado de enfermedad su paciente. Me platico que le acababan de hacer la interconsulta, y le había comunicado el ginecólogo, que hacia ocho meses había tenido un producto de sexo masculino y que días después había comenzado a rechazar al pequeño y después a tratar de hacerle daño, por lo que la separaron de el y poco a poco se fue haciendo taciturna, huraña, dejando de comer y casi sin dormir, y que como era de una ciudad cercana a Ensenada, tardaron en tener atención tres meses, pero el medico que la atendió, solo recomendó nutrientes y algunas medidas de tipo general pensando que era un desequilibrio hormonal y nutricional posparto, y la mando a su casa nuevamente. El deterioro fue en progreso, comenzando con diarreas, constantes nauseas y vomito, hasta llegar a ese estado, por lo que la familia la llevo a Ensenada con un especialista en ginecología, el que le recomendó que la trajeran con un psiquiatra ya que tenia un desequilibrio de las sustancias que modulan el estado de animo, y la trajeron dándole el diagnostico de depresión posparto, pero para esas alturas ya había una serie de complicaciones que comprometían muchos sistemas, además del hormonal, por lo que el ginecólogo pidió apoyo a medicina interna y esa era la razón por la que mi amigo se estaba haciendo cargo del caso.

     Una semana después me entere que la paciente falleció y este hecho me impacto mucho en varios sentidos, pero el mas importante fue, que en pleno siglo XXI se estuvieran muriendo las pacientes por un hecho tan evidente, y como Tanatólogo debería de comprometerme mas con este tipo de patología. Por esas fechas estaba yo por aceptar una beca para asistir a un curso de Psicofarmacología en la Universidad de Stanford y al revisar el programa se pedía que los becarios debieran de llevar un taller específico y una ponencia de las experiencias de algún tema relacionado al curso, en los lugares de origen. Obviamente me inscribí en el taller de depresión posparto y en el caso de las ponencias, lleve un artículo muy curioso, de observación y deducción puras, de la razón por la cual los pacientes que son sometidos a cirugías muy largas y que necesitan bomba de circulación extracorpórea, tienen alucinaciones de difícil manejo. El curso de depresión por parto tenia un plus, ya que como se relacionaban de manera indirecta, se manejaron los trastornos del comer, como son, la anorexia nervosa, la bulimia y la obesidad mórbida secundaria a los trastornos de ansiedad generalizada.

      A mi regreso dimos unas charlas de lo que implicaba un diagnostico de Depresión Post-Parto y los síntomas y signos mas gruesos para que el medico familiar y los ginecólogos los descubrieran de forma temprana y darles una alternativa a las madres de nuestras clínicas, que presentaran tal trastorno. Obviamente se les indico que en la clínica 20 del IMSS, donde yo trabajo, teníamos el departamento de Tanatología ya hacia mas de tres años y que podían referir a las pacientes que presentaran dicho trastorno.

     Unas semanas después llego una interconsulta referida por un medico familiar, ya que una paciente de el tenia dos años de haber parido y aunque se salía de los parámetros que se habían dictado en el curso, el creyó que aun así estaba dentro de la mayoría de los criterios y que ante la duda, él la enviaba a atención especializada otorgándole el beneficio de la duda.

     Se trataba de Yolanda, una muchacha de clase media alta, de buena cultura, trabajaba como jefa de personal en una maquiladora, pero hacia ya dos años que venia de  una incapacidad  a otra, ya que pensaba, había perdido el objetivo de su vida.

      Recibí el papel de interconsulta y le hice pasar a la oficina.

      Se trataba de una madre joven, bien vestida, pero con una imagen personal un tanto descuidada, y su mirada ausente, como tratando de ocultar algo que le avergonzaba. La invite a sentarse, lo que hizo de inmediato, pero cruzo sus piernas de manera automática y puso sus manos en forma de cruz sobre su pecho, como tratando de defenderse de algo o alguien.

“Y bien  Yolanda, en que puedo servirle” 

--¿no dice nada de mí en la hoja de envío?--- contesto sin apenas verme --- 

“bueno si, pero cabe la casualidad que no consulto papeles y si me gustaría que de tu propia voz me digas en que te puedo ayudar”

    Esto le dio un poco de confianza y recomponiendo un poco su posición en la silla, como bajando un poco los brazos y sentándose mas erguida. 

  • Bien vera doctor ……………………. Y comenzó a contarme todo lo que a continuación relato:

                       Se trataba de una joven emprendedora, muy exigente consigo misma, había estudiado administración y al finalizar, un diplomado en administración de recursos humanos, mismo que la había llevado al puesto actual. En la empresa conoció a su marido y después de conocerse por dos años, decidieron casarse, esperando un par de años para tener su primer hijo. Para esas fechas, ella tenia ya 32 años, bastante madura pero plena y antes de decidir tener a su hijo, ya habían comprado su casita y le habían arreglado una buena recamara a su bebe, incluso arreglaron un  cuarto para que la mama de Yolanda se viniera a pasar unos meses para ayudarla y enseñarle de su experiencia, a como cuidar los primeros meses a su muñeco, pues lo había deseado toda la vida y esperaba que no le faltara nada.

        Por  haberse embarazado por primera vez después de los treinta años se había diagnosticado como “producto valioso” y los cuidados se hicieron un poco mas frecuentes y casi desde el segundo mes los ultrasonidos se realizaban  muy frecuentemente para descubrir cualquier malformación o problema con el niño, en cuanto esto se presentara, lo que afortunadamente no sucedió. Estos cuidados, el diagnostico, la casa la presión del trabajo, la remodelación de los cuartos, pusieron una cuota extra de estrés en su vida.

         Ella había decidido tener a su hijo de forma natural, lo que comento con su Ginecólogo, y al no haber ninguna contraindicación real, estuvo de acuerdo, pero aun que no había ninguna evidencia que complicara el parto, después de que comenzaron los primeros dolores, el trabajo de parto se prolongo muchas horas, pero no había alerta como para sacar al niño por cesárea. Después del alumbramiento, Yolanda quedo muy agotada y perdió mucha sangre y aunque no fue necesario trasfundir, se le miraba muy pálida. Al finalizar la limpieza de la madre y haber suministrado los primeros cuidados al bebe que nació sanísimo, se decidió sedar a la madre para que se recuperara, por lo que Yolanda durmió sin ninguna preocupación y estaba muy contenta, ya que ahí estaba su marido su madre y su hijo y nada les podía pasar.

         Al día siguiente la despertaron para que le diera pecho al bebe, pero lo que debería de ser el encuentro mas feliz, no fue así, Yolanda al sentir al pequeñín en su regazo, experimento un profundo rechazo y comenzó a sentir calor en su cuerpo, hormigueo en sus antebrazos y muchísimas nauseas, lo que pretextó para que se llevaran al niño y posteriormente le daría pecho, lo extraño fue que al alejar al producto se sintió ligeramente mejor. La enfermera trajo un tiraleche, se la extrajo a la mama y de esa manera fue la forma de alimentarlo las primeras horas mientras el cuerpo medico trataba de hacer un diagnostico medico que englobara todos esos síntomas, pero al fin de una semana no había patología posible, por lo que se envió a su casa y con las instrucciones a seguir tanto para alimentar a su hijo, como para cuidarse ella y debería regresar al mes para que los vieran tanto el ginecólogo como el pediatra.

         Ya en la casa Yolanda sentía que cada vez que se acercaba al niño para amamantarlo, esas sensaciones extrañas se volvían a presentar, pero a veces si podía darle de comer y otras le pedía a su mama que se lo llevara y con el tiraleche terminaba de alimentarlo, pero comenzó a sentirse cansada todo el tiempo y se lo achacaba a la anemia ( perdida de sangre), pero se fueron agregando mas síntomas, como llanto fácil, no le llamaba la atención atender a sus visitas, por lo que se negaba pretextando cansancio, debilidad pero lo peor fue que no quería ya levantarse de la cama ni comer, además de terminar rechazando totalmente a su hijo.

         Poco a poco se fue sintiendo que dentro de su corazón se acuñaba  el sentimiento de “mala madre”. Esto le expreso a su Ginecólogo y aunque el bebe se encontraba en perfecto estado de salud, ella había adelgazado y la anemia no había mejorado nada, por lo que le sentenciaron “si no te nutres adecuadamente, te tendremos que transfundir sangre y eso no es lo mas adecuado”. Esto mas que animarla, le obligo un poco a comer pero se sentía perdida, de todo lloraba, no le llamaba la atención siquiera bañarse, ella que era todo propiedad y nunca bajaba a desayunar sin arreglarse, su esposo le insistía, hasta que dejo de hacerlo porque una sugerencia de el en cualquier tema, terminaba en una discusión muy amarga, Se fueron acumulando los meses y los síntomas no  disminuían, se daba todo tipo de consejos, todos los suplementos alimenticios , y la mamá no se regreso a su casa pues veía que Yolanda no podía hacerse cargo del bebe y siempre que había que cambiarlo o alimentarlo, ella estaba presente, lo que Yolanda agradecía, pues sentía que si su mamá no estaba ella podía hacerle algún daño al pequeño.

         Vieron cualquier cantidad de médicos, buscaron muchos remedios y cerca de los dos años, estando Yolanda cortando unas verduras para hacer un determinado platillo, vio venir a su hijo con un juguete hacia donde estaba ella y sintió un deseo intenso de clavárselo en el pecho, por lo que arrojo el cuchillo en el lavadero y salio corriendo de su casa.

         Anduvo caminando de aquí para allá, con un pensamiento metido en su cerebro, “soy mala madre” “no merezco vivir”, siguió caminando sin rumbo y sin darse cuenta se hacia noche y al recobrar el sentido de la realidad estaba sentada en una banca de un jardín  muy lejos de su casa, con una ropa con la que ella nunca se hubiera animado a salir a la calle y con los ojos rojos de tanto llorar, por lo que con muchísima pena se encamino a un abarrote para que le dieran permiso de llamar a su esposo para que la recogiera. El la había estado buscando todo el día, su suegra se había hecho cargo del hijo pero le hablo a la oficina para avisar que ella no estaba y no sabía hacia donde se había dirigido. La recogió y en el camino ella externo la necesidad de ver a alguien que la ayudara, pues eso no podía seguir así, que se había dado cuenta que odiaba a su hijo y que no lo soportaba y aun que ella trataba siempre de tratarlo bien, era necesario que su mamá estuviera presente  para que ella no perdiera los estribos y le hiciera daño.

         Era obvio que se necesitaba atención profesional, por lo que la llevaron a su ginecólogo el que sugirió que la enviaran a mi consulta,  el medico familiar dio el pase y la información directa de mi oficina; pasamos pues de los antecedentes al presente y después de aplicarle algunas pruebas escritas y escuchar esta gamma de síntomas, se determino que se tenia como diagnostico << depresión posparto >> y era necesario además de una terapia psicológica, el uso de psico fármacos y la vigilancia estrecha de un visor por lo menos de tres semanas y evitarle la responsabilidad del manejo de su hijo por el mismo periodo.

         Se cito 15 días después y había una mejoría muy importante y un mes después se le fueron dejando  nuevamente las responsabilidades, y una a una las fue superando exitosamente, y la mas importante que fue ver a su hijo con alegría, con cariño y ternura se logro hasta los tres meses, por lo que su mama se regreso a su tierra seis meses después de iniciada la terapia, donde ella fue pieza fundamental. El esposo encontró nuevamente el rumbo, pues se pudo despreocupar mucho del manejo de su casa ya que al ser retomadas las obligaciones por la esposa, todo parecía andar sobre ruedas y no solo eso, tenía nuevamente con quien platicar y su vida marital se renovó por completo. Ocho meses después su empresa decidió solicitarle el traslado a Ensenada como gerente general de su sucursal a lo que ella accedió gustosa, por fin había recuperado su vida.

         Cabe mencionar que la paciente duro dos años viniendo a la consulta desde Ensenada, llevando al pie de la letra su tratamiento farmacológico y su terapia cognitiva y al final de este periodo y después de una técnica de “destete” o deprivación de los fármacos, actualmente Yolanda lleva su vida normal y me ha informado que esta nuevamente embarazada y con una vigilancia muy estrecha tendrá a su bebe y no padecerá nunca mas ese infierno.

   Adendum:    Cabe mencionar que esta es una publicación semanal y la puede buscar en esta sección todos los lunes. Además el ultimo viernes de cada mes nos podrá escuchar por la frecuencia 1420 de AM en nuestro programa mensual, y si tiene alguna sugerencia o desea consultar o enviar su caso, se le atenderá en el correo electrónico instati@hotmail.com. O bien nos puede hablar al 682-19-65  
 

3 comentarios

lucia lopez cardenas -

hola mi nombre es lucia lopez cardenas,y empezare por decir que tengo de cerca de un año leyendo su publicacion y me declaro su admiradora,.soy unamujer viuda de 40 años,y madre de 3 hijos.ojala pudiera contestar mi mensaje.no es tanto mi caso el que acontinuacion tratare de contar,hace mas de 3 años aqui en tijuana secuestraron y al parecer mataron a mi hermano digo al parecer pues hasta el dia de hoy no hemos sabido nada de el.esto fue y es un gran dolor para mimadre yo no se de que manera consolarla es terrible ver con que dolor llora a su hijo,me gustaria que usted me diera algun consejo de como tratar de hablar de esto yo cuando visito a mi madre no yo toco el tema,no tolero verla llorar.he de decir que ella vive en el estado de nayarit,ella dijo que es muy cobarde para quitarse la vida pero que para ella ya no tenia sentido la vida,era el hermano menor.de antemano agradezco su atencion y mas agradecere algun consejo. sin mas por el momento su lectora semanal.

FLOR MARIA -

Lei su comentario del lunes 21 de este mes, el cual me agrado saber que aqui en la ciudad hay quien puede ayudar de esta manera a mucha gente, lo anterio se debe a que tengo un tio que perdio a su esposa hace 5 anos de una manera repentina (fue atropellada) ella era mi familiar directa (Tia) hace poco tuvo la remodelacion de su depto. por parte de la empresa que se lo renta y todos sus recuerdos fueron nuevamente abiertos lo que desencadeno una crisis emocional que afecto mas su corazon del cual esta operado hace ya 7 anos y fue hospitalizado lo cual ayudo para tranquilidad de el y mia. No tenemos IMSS, hay algun lugar donde lo consulte o tal vez platicas a las que podamos asistir? Agradecere su informacion al respecto, gracias por sus comentarios que en lo personal, realmente hacen tomar conciencia, y yo tambien necesito aprender a expresar lo que realmente quiero pues no tengo la comunicacion necesaria con mi esposo y deceo poder tenerla y saber reconocer mis propios errores.

blenda -

hola!!
estudio psicologia en el ultimo semestre. y quisiera saber donde puedo estudiar tanatologia, vivo en playas de tijuana, y me interesaria saber que escuela tiene esa carrera para tomarla?